Visita del Papa a Colombia decidirá futuro del CELAM

Las palabras del papa Francisco durante esta reunión serán decisivas para el futuro y la misión de esta institución de la Iglesia en América Latina. Así lo ratificó el cardenal Rubén Salazar Gómez, arzobispo de Bogotá, primado de Colombia y presidente del CELAM, en entrevista concedida a la Oficina Arquidiocesana de Comunicaciones, OAC.

Así mismo, luego de la celebración de sus 50 años de ordenación sacerdotal y 25 de ordenación episcopal, el cardenal Rubén Salazar manifestó su alegría por el camino recorrido y los frutos de la misión encomendada al servicio de la Iglesia y de los demás.

“Me siento plenamente feliz… yo nací cura, desde los 6 años ya quería ser sacerdote, toda mi vida quise serlo, me crié en un ambiente, en una familia donde la fe se respiraba siempre, de tal manera que la fe para mí ha sido como el agua en la cual se mueve un pez”, afirmó.

Organización y claridad en el pastoreo

Las grandes cualidades del arzobispo de Bogotá son la organización y la puntualidad, es estricto con los tiempos, con las tareas, con las metas. Es de la única manera para lograr responder a todas las responsabilidades asignadas en la Iglesia arquidiocesana, latinoamericana y universal. Tiene un carácter conciliador, gran capacidad de escucha, sencillez, sensibilidad humana y sobre todo coherencia y sabiduría en su actuar.

El presbiterio de la Iglesia bogotana lo aprecia, lo respeta y lo siente cercano. Están tranquilos porque su pastoreo y dirección es clara, con un horizonte fijo para salir al encuentro de los demás, con una iglesia en movimiento, de acogida y de acciones al llevar y transmitir el evangelio.

¿Quién es el Cardenal?

Rubén Salazar nació en Bogotá el 22 de septiembre de 1942, pero se educó en Ibagué y en el Seminario Menor San Joaquín estudió bachillerato y Filosofía. En Roma, en la Pontificia Universidad Gregoriana, obtuvo la licenciatura en Teología y en el Pontificio Instituto Bíblico, la licenciatura en Sagradas Escrituras.

Monseñor José Joaquín Flórez Hernández, obispo de Ibagué, lo ordena presbítero el 20 de mayo de 1967 y allí desarrolla una amplia labor pastoral como párroco en Inmaculado Corazón de María, fue también, capellán, maestro y formador del Seminario.

Once años en esta ciudad marcaron su vida, vivió de cerca realidades de desplazamiento, pobreza, desempleo, invasión, conoció las periferias y toda la realidad que allí existe. Trabajo que lo hizo reflexionar sobre esta realidad que se vive en muchas zonas del país, experiencia que cambió e hizo más sensible su corazón. En Ibagué, San Juan Pablo II lo nombra obispo de Cúcuta el 11 de febrero de 1992 y es ordenado por el entonces nuncio Paolo Romeo el 25 de marzo, en la Solemnidad de la Anunciación. Luego de siete años es elegido como tercer arzobispo de Barranquilla y el 15 de mayo de 1999 toma posesión de su nueva sede.

Luego, el papa Benedicto XVI el 8 de julio de 2010 lo nombra Arzobispo de Bogotá y Primado de Colombia y toma posesión de este nuevo cargo el 13 de agosto, siendo Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, cargo al que fue reelegido en 2012.

Momento de salvación para Colombia

Sobre la visita del papa Francisco a Colombia en el próximo mes de septiembre el cardenal Rubén Salazar considera que será un momento de salvación para el país: “El Papa ha sido un apoyo fuerte en este proceso de paz , su visita tendrá un efecto positivo en todos los ámbitos, y especialmente  cuando nos invita a cada colombiano a dar el primer paso… hacia adelante, a dejar el pasado violento, perdonar y avanzar decididamente hacia la democracia”.

“La presencia entre nosotros del Sumo Pontífice será especial, se cumplirá ante todo el anhelo de tenerlo aquí entre nosotros y será grato en todo sentido, ya que él conoce y tiene alma latinoamericana”. Reiteró el Cardenal.

Por esta razón es nuestro invitado especial, los invitamos a ver la entrevista completa a continuación: