Trabajo pastoral 90% fuera de los “muros del templo”

Tiene a su alrededor más de 200 empresas grandes y pequeñas; la gran mayoría conocen al párroco, al padre José Edilberto Palacios Corzo, quien llegó a acompañar esta comunidad desde hace tres meses. Y, es que el padre José Palacios inició su labor pastoral realizando mapas cartográficos urbanos de la zona de su parroquia, y luego, se dio a la tarea de visitar una a una de estas empresas, negocios o locales. El resultado es que él ya conoce a las ovejas que debe cuidar y los fieles, también saben, que hay un sacerdote que los acoge y los invita a formar comunidad.

Es así, luego de esta labor maratónica de “salir al encuentro”, como el padre Palacios, pudo evidenciar o reconocer, cinco grandes desafíos pastorales en esta parroquia:  El primero es llegar a todo ese mundo empresarial que está dentro de los límites urbanos del templo. Labor que ya inició y que continúa. El segundo, es poder abordar al mundo artístico, también de la zona, ya que sobresalen academias tradicionales de música o de Ballet, por ejemplo. El tercero, es el mundo deportivo, muchos escenarios de práctica de variados deportes se evidencian allí, especialmente el básquetbol. Poder compartir un rato deportivo con algunos jóvenes del sector, es otro desafío.

El cuarto reto lo encuentra el padre José en la cantidad de negocios o mundo comercial que se mueve en este sector de la ciudad; desde negocios con franquicias internacionales hasta lujosas y destacadas salas de belleza, también una gran gama de restaurantes y un circulo gastronómico de todos los niveles, el sector de la salud también allí presente, comercializadoras de vehículos y supermercados entre otros.

Y, finalmente el quinto gran desafío que tiene ante sus ojos el párroco, está en poder llegar a abrir puertas e invitar a la gente a hacer parte de las actividades parroquiales, en las  grandes torres habitacionales que se están construyendo alrededor, dentro de este perímetro urbano. 

Reseña de la parroquia San Luis Beltrán

El templo está ubicado en la Calle 86A No 24-62. Tiene 63 años de haber sido fundado, mediante el  decreto arzobispal No. 70 del 11 de octubre de 1960, del entonces Señor arzobispo de Bogotá, Cardenal Luis Concha Córdoba, se erigió canónicamente esta parroquia con el título de San Luis Beltrán y fue nombrado, primer párroco, al Presbítero Siervo de Jesús Cruz Garzón. Estuvo como párroco aquí por 32 años

Su lema pastoral, que confió a su comunidad parroquial  en ese entonces fue: "Pensar bien de todos, hablar bien de todos y hacer el bien a todos"; este ideal lo tomó de su obispo Monseñor Perdomo, quien a su vez lo tomó de San Agustín. Y, fue llamado a La Casa del Padre Celestial el 18 de abril de 1996. La planificación y la regularidad homogénea de este barrio El Polo Club, se convierte en un legado de la historia de un sitio que alberga la memoria de cientos de familias y sus generaciones siguientes; testigos de la transformación y mutación en la cuna que recibe una de las obras de vivienda, incluida la parroquia, de un gran arquitecto colombiano, Rogelio Salmona.

Hoy en día la estructura general del barrio en cierta manera se conserva; las viviendas se han alterado en su exterior pero el uso puede variar contemplando así una nueva población y recibiendo nuevos usos como las oficinas y empresas. Sin embargo, las tres grandes avenidas que lo circundan y sumándole el tráfico automotriz de las carreras 22 y 24, han hecho que la tranquilidad de vida del barrio residencial y de la misma parroquia, se haya perdido poco a poco. Los habitantes originarios del barrio y los fieles laicos de la parroquia han dejado el legado de esa vivencia, pero 63 años después de su concepción, no muchas familias de tradición siguen viviendo en este hito urbano.

Datos del párroco

El padre José Edilberto Palacios Corzo nació en Ragonvalia (Norte de Santander), el 27 de noviembre de 1969 en el hogar conformado por José del Carmen Palacios y María Antonia Corzo.  Estudió secundaria en el Colegio Policarpa Salavarrieta (1987 - 1989), Filosofía (1990 – 1992) y Teología (1993 – 1996) en el Seminario Mayor de Bogotá. Fue ordenado Presbítero en Bogotá el 19 de diciembre de 1996 por el Señor Cardenal Pedro Rubiano Sáenz para el servicio de la arquidiócesis de Bogotá. Tiene una Licenciatura en Teología , de la Pontificia Universidad Javeriana (2000).

Inició su servicio pastoral para la arquidiócesis como vicario parroquial en la Inmaculada Concepción – Fómeque (1996), párroco Ad Tempus en Santo Toribio de Mogrovejo (1998), Capellán Colegio Provinma (2000), párroco en Santa María de la Esperanza (2005), párroco en San Gabriel Arcángel (2009), Arcipreste del Arciprestazgo No. 4.2 (2010), notario auxiliar de la zona pastoral de San José (2011), Formador del Seminario Conciliar de Bogotá (2012), Párroco en San Luis Beltrán ((2023).