Parroquia San Juan Bosco, primer templo dedicado al santo de la juventud en Colombia
Ubicada en el norte de Bogotá, localidad de Usaquén, esta parroquia, de la mano los Salesianos de Don Bosco (SDB), se ha convertido en un pilar fundamental para la comunidad, no solo en términos espirituales sino también sociales.
“Los salesianos llegamos a este sector de la ciudad un poco antes de 1949. En esta casa -en nuestro lenguaje la llamamos así, pues Don Bosco quería que nuestros ambientes fueran de familia-, en el terreno contiguo al templo, funcionó el Seminario y el Centro de Estudios”, precisa el padre Wilfredo Higuera SDB, párroco.
Agrega que esta parroquia, junto a la parroquia Santa Bárbara de Usaquén, son las más antiguas del sector que, hoy día, se caracteriza por profundos contrastes a nivel social y económico, pero con la riqueza de una comunidad que ha venido creciendo en la fe, que cuenta con presencia y servicio de la vida religiosa, así como de instituciones educativas, haciendo palpable la siembra del carisma salesiano, desde la cercanía, la solidaridad y las distintas apuestas para la formación integral de la persona, especialmente de los jóvenes.
Esta misión se ha extendido a los cerros orientales, principalmente al barrio Soratama, en el que funcionan importantes obras en beneficio de esta comunidad vulnerable: el comedor comunitario de la Fundación San Juan Bosco y la capilla, espacios desde los que se acerca el amor misericordioso de Dios Padre, siendo luz y esperanza a nivel social, pastoral y evangelizador.
La población de la zona, según el último censo y quedando por incluir los hogares que se empiezan a configurar en proyectos urbanísticos de gran magnitud, oscila entre 50 mil y 60 habitantes.
“Es un dato muy variable, y como desafío de la parroquia está la atención a un sector que es demasiado variado: tenemos estrato 1 y estrato 5, entonces hay que saber conjugarlos. Hay que saber acercarnos a ellos … Cómo atraer y también atender las necesidades pastorales”, explica el religioso, quien enfatiza en la prioridad del trabajo con los jóvenes del sector.
Iniciativas que conectan con la juventud
Buscando que los jóvenes experimenten la presencia amorosa y misericordiosa de Dios, desde espacios de encuentro, formación y proyección que nutran su vida y los aleje de realidades de violencia y de vicios, desde la parroquia se adelantan distintos programas como: La Escuela Sinfónica Valdoco y la Escuela Deportiva Valdoco, entre otras propuestas que se articulan con la misión y servicio de la congregación en Colombia y en el mundo.
“La Banda Sinfónica es un proyecto a nivel nacional… En la parroquia participan cerca de 45 jóvenes… La proyección es que, una vez terminada la formación, estos jóvenes puedan entrar a un conservatorio; a dirigir algunas bandas sinfónicas importantes en el país; y a pertenecer a la Orquesta Filarmónica de Bogotá …”, explica.
El impacto a nivel personal y familiar de estas apuestas es, sin lugar a dudas, el mayor fruto:
“Estas iniciativas han favorecido el uso del tiempo libre de los muchachos. También ha sido una oportunidad muy bonita de ver el cambio en ellos, en sus familias y en sus entornos. Ellos no pagan un solo peso, ha sido totalmente gratuito … Son muchachos que de situaciones muy difíciles han podido hacer una transición hacia entenderse útiles, hacia saber que tienen cualidades muy importantes para seguir explotando. Aprenden a usar el tiempo libre en cosas que les ayudan para la vida… Además, buscamos que tengan una experiencia se sentirse amados por Dios, que encuentren posibilidades de mejorar sus condiciones de vida, y salir de un mundo que muchas veces parece muy duro, pero que sepan que el mundo es mucho más amplio”, precisa el sacerdote.
Para vincularse, agrega, solo se requiere “ganas de participar, compromiso, un buen nivel académico y que la familia los acompañe y respalde en este proceso”. Los interesados se deben acerca al despacho parroquial o directamente al párroco, quien les orientará en el tema.
Otros frutos pastorales y desafíos en la evangelización
Como Familia Salesiana, la obra pastoral, evangelizadora y social, liderada por su párroco, el religioso salesiano Wilfredo Higuera, en coordinación con el vicario parroquial, el padre Rubén Darío Jaramillo, cuenta con el apoyo de distintos servidores vinculados como: Las Hijas de María Auxiliadora, la Asociación de Damas Salesianas, la Asociación de Salesianos Cooperadores, la Asociación de María Auxiliadora, grupos, movimientos apostólicos y/o eclesiales: Emaús - hombres y mujeres, Effetá, pastoral juvenil, ministros extraordinarios de la comunión, entre otros. Se encuentra en proyección la experiencia salesiana del Oratorio, que busca que los jóvenes del sector participen en experiencias formativas y de adecuado uso del tiempo libre.
Caridad pastoral en expansión misionera
La parroquia San Juan Bosco se destaca por su proyección pastoral y social. El programa "Pan Compartido" es muestra de una Iglesia en salida que se acerca a las realidades humanas de manera fraterna y solidaria, al ofrecer acompañamiento a familias vulnerables mediante la entrega de mercados, de la mano de procesos de evangelización y capacitación.
En colaboración con la Asociación de Damas Salesianas, se gestiona un ropero comunitario y un comedor en Soratama, un sector popular de Usaquén, con el que se beneficia a población vulnerable: niños entre 5 y 17 años; y adultos mayores entre los 65 y 80 años. Se brinda la alimentación y programas formativos entorno a valores humano – cristianos.
En esta zona, también, se brinda atención pastoral y evangelizadora desde la capilla de Soratama, cuya construcción fue promovida por la comunidad del sector.
"Hemos visto cómo se han empoderado las comunidades antaño, donde ellas mismas han generado sus dinámicas de organización, de la mano de Salesianos que han pasado por esta casa", señala el padre Higuera.
Celebrando 75 Años: Un legado de fe
Este año, la parroquia celebra sus 75 años de fundación, un hito que marca décadas de servicio y dedicación. "Es la primera parroquia en el país en honor a nuestro fundador, a San Juan Bosco", afirma el padre Higuera. La celebración incluirá una eucaristía solemne el 10 de diciembre de 2024, intervenciones artísticas y la reinauguración de un órgano tubular alemán, una joya de la parroquia.
“Queremos invitarlos a que, como comunidad, no solamente parroquial, sino pues del sector del nororiental de Bogotá pues podamos celebrar estos 75 años de presencia como parroquia en este sector tan significativo de la ciudad”.
El párroco
El padre Wilfredo Higuera Rey, bogotano, pertenece a la Familia Salesiana de Don Bosco. Fue ordenado el 8 de octubre de 2022, y actualmente es el párroco de la parroquia San Juan Bosco. Estuvo en esta casa, mientras estudiaba teología.
Ha servido como coordinador de la pastoral juvenil en la casa salesiana de Mosquera (Cundinamarca) y en distintas instituciones educativas.
A su comunidad…
“La parroquia es de todos. Ustedes han formado esta parroquia, sintamos propio este templo y las iniciativas pastorales que promovemos… Es importante que nos sintamos parte de la Iglesia, no solamente viniendo a las misas, sino orando por nosotros, orando y participando en las propuestas pastorales que podamos ofrecer”.
A continuación, amplíe detalles sobre el servicio y frutos de la Comunidad Salesiana en el norte de la capital:
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