Escuela para la familia
La evangelización de la familia es una preocupación permanente en la arquidiócesis bogotana, por eso existe una coordinación que se ocupa de la formación del…
Aunque el grupo de animadores es más grande, esta vez acudieron unas cuarenta personas para escuchar la charla de la hermana Sabrina, de la comunidad de la Sagrada Familia de Urgell, especialista en prevención de adicciones.
La hermana Sabrina está trabajando en la Casa Misericordia, en la localidad de Usme, en la que se atienden diversos problemas surgidos en el entorno familiar, en especial las adicciones. El énfasis es la prevención a través de la escucha:
La Coordinación de la Familia tiene la sede en el tradicional barrio bogotano de Chapinero, allí, en una casa grande en donde viviera una familia, se llevan a cabo las reuniones de formación de los voluntarios de esta pastoral.
El voluntariado tiene dos vías de acción, cuando se cree que se está dando es cuando más se recibe así es el testimonio de una de las voluntarias de los centros de escucha, allí donde se recibe y oye a los solitarios, tristes y angustiados que van en busca de ayuda y consuelo:
El trabajo de coordinar viene desde las vicarías y de la coordinación de la Familia, en cabeza de monseñor Nelson Ortiz; pero son los voluntarios los que día a día hacen crecer este servicio, por eso El Catolicismo habló con la psicóloga Maritza Muñoz, quien desde la vicaría de la Inmaculada Concepción presta su servicio pastoral y profesional en el Centro de Escucha de la parroquia de Las Nieves:
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