El papa Francisco destacó 4 importantes enseñanzas de San Pablo VI aplicables a cualquier realidad eclesial misionera.
En su discurso pronunciado este 8 de abril al recibir a la fundación Marcello Candia, el Santo Padre recordó algunos consejos que el Papa Pablo VI dio al fundador de esta organización caritativa que ayuda a personas enfermas y pobres en el Noreste de Brasil.
1. “Si construyes un hospital en Brasil, que sea brasileño.... Es decir, bien insertado en la realidad local, implicando a la gente del lugar... Inculturación: tomar la cultura del lugar donde vamos a trabajar”.
2. “Tener cuidado de evitar cualquier tipo de paternalismo, no imponer sus ideas a los demás, incluso con buenas intenciones” y el Papa Francisco advirtió que el venerable Marcello Candia “era un empresario, estaba acostumbrado a tomar las decisiones por sí mismo, así que tuvo que aprender a dirigir las cosas de otra manera”.
3. “Haga el hospital no solo ‘para’ los brasileños, sino ‘con’ los brasileños. No solo ‘para’, sino ‘con’. Esto es importante, es una regla general de la caridad: trabajar con la gente a la que sirves”.
4. “Tener como objetivo final que ya no te necesiten” y el Santo Padre añadió que “cuando te des cuenta de que el hospital camina solo, entonces habrás conseguido una ‘verdadera obra de solidaridad humana’. Esta es también una regla muy sabia: no atar a las personas y a los trabajos a sí mismo, no ser indispensables, sino que, por el contrario, formar a sus colaboradores y asegurar la estabilidad y la continuidad, con colaboradores”.
Finalmente, el Papa Francisco añadió agradeció a la fundación por su acción caritativa y destacó la importancia de “sostener a las comunidades locales y misioneras en las iniciativas con enfermos, leprosos y personas necesitadas”. En particular, el Santo Padre destacó que los gastos de operación de esta fundación son pocos porque casi todo se destina a favor de las obras en Brasil.
“Esto es muy importante, porque hay organizaciones y asociaciones que trabajan para hacer el bien, pero tienen una estructura de personas, de cosas que -no exagero- la mitad o el 60% van a pagar sueldos. No, eso no es bueno. El mínimo, para que la mayor parte del dinero vaya a parar al pueblo. Esto es importante, sigan así”, concluyó el Papa.
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