8 formas de vivir el Adviento como un tiempo de gracia

El camino de preparación hacia la Navidad es un tiempo especial y maravilloso, pero muchas veces nos encuentra con demasiadas tareas pendientes, y la rutina hace que desviemos la mirada de la verdadera razón de este tiempo: Jesús.

Por eso, ACI Prensa comparte algunas claves para vivir un Adviento diferente, con actividades sencillas pero significativas para recordarte a ti mismo y a tu familia la importancia del encuentro con el Señor.

Se trata de ocho formas para mantener el Adviento como un periodo de gracia, una por cada letra de la palabra.

A, de Adoración

El tiempo de Adviento es un momento preciso para tener un encuentro con Jesús Sacramentado y sumergirnos en un diálogo profundo y sincero con Él, aguardando el misterio de la Encarnación.

D, de Domingo

Cada domingo de Adviento es un paso hacia la Navidad. Por eso nos acercamos a celebrar la Misa, para compartir con la comunidad el anticipo del gran gozo que será la llegada del Salvador, escuchando su Palabra y encontrándonos con Él en la Eucaristía.

V, de Venida

Debemos recordar que Jesús ya viene, y para preparar el corazón y vivir intensamente este tiempo, estamos llamados al arrepentimiento y a la esperanza. Por eso, nos acercamos al sacramento de la Reconciliación.

I, de Inmaculada Concepción

En medio del Adviento, la Iglesia celebra la Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María, una fecha para expresarle nuestra especial devoción a la Virgen, quien trajo en su seno al Salvador del mundo. Podemos rezar una oración o cantarle una canción a María o llevarle una ofrenda floral, además de asistir a Misa (es día de precepto).

E, de Espera

La espera del tiempo de Adviento es sinónimo de esperanza, de alegría. Estamos llamados a sembrar esa esperanza en los demás a través de un gesto solidario con los que más lo necesitan. Que nuestra generosidad sea signo de esperanza y símbolo de Jesús, que se acerca a todos.

N, de Nacimiento

El nacimiento de Jesús es también una invitación a hacer surgir todo lo bueno. Por eso estamos llamados a sembrar, dentro de cada uno y en los demás, buenas actitudes, gestos de amabilidad y ayuda desinteresada. Que este tiempo sea propicio para que nazcan en tu interior aquellas virtudes que te acerquen más a Dios.

T, de Tradición

Para dar a nuestra familia un recordatorio diario de lo sagrado del Adviento, podemos incorporar algunas tradiciones propias de este tiempo en el hogar, favoreciendo el compartir y la unión. Algunas de ellas son la corona de Adviento, el calendario, la decoración del hogar. Los más pequeños pueden hacer una carta o un dibujo para regalárselo al Niño Jesús.

O, de Oración

Otro elemento fundamental que nos ayudará a disponer nuestro interior para la llegada de Jesús es la oración. En esta época especial, le pedimos al Señor que llegue a nuestro corazón, que nazca en nosotros para desterrar el pecado. En la oración recordamos que Dios se acerca una vez más trayendo la esperanza, y honramos también la figura de María, Madre de Dios, pidiéndole que podamos seguir su ejemplo de entrega generosa y desinteresada.

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