Una pastoral dinámica y organizada en torno a la evangelización
El papa Pío XII, Siervo de los Siervos de Dios, para Perpetua Memoria por medio de la bula “Ne Nimia Diocesium amplitudo…” del 1° de septiembre de 1951 creó la Diócesis de Zipaquirá desmembrándola de la Arquidiócesis de Bogotá. Es la primera Diócesis fundada en el siglo XX en el territorio del departamento de Cundinamarca.
Actualmente, cuenta con 71 parroquias y su obispo es monseñor Héctor Cubillos, quien tomó posesión canónica como su quinto obispo en Zipaquirá el 14 de agosto de 2004. Su catedral es la Santísima Trinidad y San Antonio de Padua de Zipaquirá.
Territorio
En amarillo el territorio de la Diócesis de Zipaquirá
Vida pastoral
Pastoralmente, la Diócesis de Zipaquirá lleva casi 25 años de un trabajo muy planificado y organizado con un plan de pastoral muy dinámico y de mucha atención por la evangelización en todas sus parroquias. Una de las características fundamentales de la Diócesis y que se ha destacado a nivel nacional e incluso fuera del país, es la acción y formación catequista, a través del Instituto Catequístico de Zipaquirá “Este Instituto se ha empeñado a lo largo de todos los años, por formar catequistas y hacerlo de la mejor manera y por darle una fortaleza a esta pastoral muy grande y lo ha logrado evidentemente”, indica monseñor Cubillos.
La Diócesis trabaja desde hace 20 años en el llamado Plan de renovación de la vida y de la pastoral parroquial. Es un acento que se encuentra en todas las parroquias. “Son las parroquias los lugares donde las personas pueden tener un contacto mucho más más cercano, más más propicio para el encuentro con la iglesia y el encuentro con el Señor. Por eso, nuestro esfuerzo está puesto en la renovación de la vida de la pastoral parroquial, precisamente para poder tener una cobertura mucho más grande a todos los fieles de nuestra Diócesis y formar discípulos misioneros”.
Principales desafíos de la Diócesis de Zipaquirá
Según monseñor Cubillos, uno de los principales retos que tiene la Diócesis es la formación permanente de los sacerdotes “Este es un punto que es fundamental, porque sabemos en la iglesia la importancia y la misión de los sacerdotes es fundamental para la vida de la iglesia. Entonces hemos hecho bastantes trabajos y actividades y tenemos en los programas de formación permanente para el clero ese es uno de los desafíos importantes”.
Otro desafío importante, es la creciente urbanización que ha tenido el territorio de la Diócesis de Zipaquirá, especialmente la sabana de Bogotá “Esas poblaciones de Chía, Cajicá, Zipaquirá, Tocancipá, Gachancipá son poblaciones que tienen un desarrollo y crecimiento habitacional muy grande, con un dinamismo y una velocidad muy especial. Entonces, eso nos plantea un reto muy grande, con todo lo que llamamos nosotros pastoral urbana, precisamente de acomodar nuestro servicio y la vida de la iglesia a estos condicionamientos modernos de un urbanismo de secularización, de desarrollo social y cultural de las grandes ciudades y la influencia claro está de la capital de Bogotá”.
Para finalizar, monseñor Cubillos nos envía una invitación “Bueno un saludo para todos ustedes queridos hermanos en Cristo y les hago una invitación muy grande para que nos empeñemos verdaderamente en responder a lo que el Señor quiere de cada uno de nosotros, de nuestras familias, de nuestras realidades sociales, económicas, políticas y para que especialmente creo que es muy importante pedir y de promover con mucha atención las vocaciones sacerdotales porque estamos en un periodo de necesidad de vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada”.
A continuación la entrevista completa con monseñor Héctor Cubillos, obispo de Zipaquirá
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