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Una Vicaría joven, pero con enormes desafíos

17 de febrero de 2022
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En el año 2017 el entonces señor cardenal Rubén Salazar Gómez, arzobispo de Bogotá, considerando que en los últimos años el crecimiento urbanístico y demográfico de la zona sur de Bogotá, decidió crear la Vicaría Episcopal Territorial Santa Isabel de Hungría, segregada de la Vicaría Episcopal Territorial del Espíritu Santo. Nombrando como su primer vicario a monseñor Jorge Acevedo. El Señor Cardenal dio el nombre a la Vicaría de Santa Isabel De Hungría, porque es la Santa Patrona de la Arquidiócesis de Bogotá y representa la bondad y generosidad con los más pobres y vulnerables.

La Vicaría ocupa todo el territorio de la localidad 19 de Bogotá, llamada Ciudad Bolívar, y está ubicada al sur de Bogotá, con aproximadamente 713.764 habitantes, distribuidos en 13.000 hectáreas, se caracteriza por ser una de las localidades más extensas, dinámicas, diversas y complejas de la ciudad.

Ya en el año 2018, es nombrado como nuevo vicario a monseñor William Casas, quien se encontraba como rector del Colegio Parroquial Santa Isabel de Hungría, recibió el nombramiento con responsabilidad y entusiasmo “Es una exigencia muy grande, la Vicaría es muy compleja tiene una situación de pobreza, de hacinamiento en muchos lugares, pero me asombra la fuerza y el empuje que tienen los sacerdotes de la Vicaría”.

En este momento cuenta con 32 parroquias, pero tres de ellas están en manos de tres sacerdotes que tienen dos parroquias.  Son entonces 29 sacerdotes, no solo de la Arquidiócesis de  Bogotá sino también, de otras Diócesis o de comunidades religiosas y están sirviendo en la Vicaría Episcopal.

Trabajo pastoral

Monseñor Casas,  indica que luego de una reunión con todos los arciprestes ha encontrado tres elementos y desafíos en los que se debe enfocar el trabajo pastoral y social en la Vicaría:

  • El primero es la pastoral vocacional: Se observó con gran preocupación que no se está realizando el acompañamiento a los jóvenes que quieren entrar en la vida religiosa¡, siendo sacerdotes o religiosas “Queremos centrarnos muy particularmente en esa atención a todos aquellos que sienten el llamado del señor a la vida sacerdotal o religiosa”, indicó monseñor Casas.

 

  • Segundo la formación de laicos: Se pudo observar la falta de formación de las personas que desean colaborar en los diferentes ámbitos y servicios de la Iglesia. Para ello, se decidió abrir la Escuela de formación para la evangelización, que se realizará en el barrio Potosí. Será una formación tanto virtual, como presencial.

 

  • Tercero el servicio de  la dimensión humana integral: Desde la pastoral social se tiene la urgencia de poder atender las diferentes realidades que se viven en este sector de Ciudad Bolívar. Por eso, desde  la Vicaría se pretende realizar un trabajo en conjunto con instituciones oficiales para poder ofrecerle a las personas un abanico de servicios y ayudas.

 

 Comunidades religiosas

El apoyo de las comunidades religiosas es primordial en todo el trabajo pastoral y social que se necesita en este sector de Bogotá, “Es muy interesante ver el apoyo que precisan las comunidades religiosas en ese sector de la Arquidiócesis de Bogotá, sin embargo,  quiero mostrar la escasez de comunidades religiosas, ante una necesidad tan grande de evangelización, de atención desde los diferentes ámbitos a niveles a a nuestra comunidad”, indica monseñor William.

Actualmente, la Vicaría de Santa Isabel De Hungría, cuenta con 12 comunidades religiosas (10 femeninas y 2 masculinas). “La masculinas son los padres Somascos y los padres Salesianos y algunas femeninas son las hermanas Dominicas, las hermanas Salesianas, hermanas Vicentinas y  las hermanas del Buen Pastor, entre otras”.

Estas comunidades especialmente en las parroquias tienen un compromiso de formación y capacitación  “Los padres Salesianos con el Centro de Formación Don Bosco, allí tienen ahí una capacitación a un grupo muy amplio de niños y jóvenes a quienes se les va formando en diferentes áreas y  profesiones, de modo que ellos luego puedan salir a laborar. Por otra parte, las hermanas Dominicas tienen un jardín infantil y colegio de primaria, las hermanas del Buen Pastor ayudan específicamente en la parroquia y las Salesianas que están trabajando con niñas que han sido vulneradas en su integridad, en su intimidad, en su cuerpo y trabajan de una manera muy cercana,  llegando a esa realidad que necesita tanta atención y tanto de la mano del Señor Jesús para sanar esas heridas”, afirma monseñor Casas.

Comunicación en la Vicaría

Para monseñor Casas, las comunicaciones son muy importantes en el desarrollo de toda la pastoral, más en tiempos de pandemia “Las comunicaciones son realmente importantes y la pandemia nos hizo ver la urgente necesidad de formarnos para una mejor y eficiente comunicación, desafortunadamente no contamos con los recursos económicos, humanos para poder llegar a ofrecerle a la comunidad todos esos medios de comunicación por medio de los cuales podamos llegar una evangelización más cercana, más eficaz que pueda llegar a sus manos”.

Pero la Vicaría cuenta con su página web, redes sociales que se alimentan constantemente. Por otro lado, en algunas parroquias se cuenta con un delegado de comunicación que se ha ido formando en la Red Animadores de la Comunicación de la Arquidiócesis de Bogotá, “Necesitamos más, esta Vicaría es todavía naciente, no tiene todavía los 4 años y ojalá que pudiéramos contar con mayores recursos y económicos para contar con una mejor inversión y  lograr una mejor capacitación de nuestros fieles”.

A continuación la entrevista con monseñor William Casas:

Entrevista a monseñor William Casas, Vicario Episcopal en Santa Isabel de Hungría
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