La luz poderosa de su palabra revelada, renueva nuestras vidas
La celebración inició, en la puerta de la Catedral, en torno a fuego. Allí, se encendió una hoguera, monseñor Rueda bendijo el fuego, y de él se tomó lumbre para encender el cirio pascual, en el que estaban grabados la Cruz; las letras ‘alfa’ y ‘omega’, (primera y última letras del alfabeto griego, respectivamente), para expresar que Cristo es el principio y el fin de la historia.
Luego, inició la procesión hacia el interior de la Catedral, la cual se encontraba con las luces apagadas. Los asistentes, tomaron un cirio y lo encendieron tomando fuego del cirio pascual, símbolo de fe y de caridad cristiana, del amor que nos viene de Dios nos inunda.
Posteriormente, monseñor Luis José, bendijo el agua con una oración que retoma los principales pasajes del Evangelio en donde se menciona el agua como elemento del que Dios se ha servido para salvar.
En su homilía monseñor Rueda, nos recordó que Cristo quiere transformar nuestras vidas "Ha llegado la noche de la luz, de la libertad, la noche de la pascua para salir en camino, y nosotros como bautizados, como iglesia, debemos siempre buscar la libertad en el resucitado y anunciándola, solo ÉL, nos libera del pecado, de ese Egipto que nos esclaviza, cada uno sabe cual es el pecado que tiene y que es necesario levantarse y ponerse en camino pasar el mar rojo y ponerse en la tierra prometida. Somos anunciadores de esa libertad. Cristo a través de los sacramentos y de la luz poderosa de su palabra revelada quiere transformar nuestro país, cuando hablamos de resurrección y de vida abundante, hablamos de una ciudad como Bogotá, de los pequeños pueblos de Colombia, hablamos de de esa necesidad de vida. Primero, ÉL resucito y nos da vida abundante, segundo, el nos da la alegría de ser bautizados, tercero ÉL nos trae la valentía misionera, para que vayamos al mundo a anunciar que ÉL esta vivo en medio de nosotros. Cuarto, que el resucitado que es luz del mundo, por nuestro bautismo nos llene de esperanza y renueve en Colombia y en la humanidad la esperanza para que todos trabajemos por la paz.
Fuente Disminuir
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