Colombia está llamada a recorrer caminos de perdón
- El Papa propone crear un fondo contra el hambre y, para lograrlo, debemos ser fraternos, ser capaces de dialogar como verdaderos hermanos.
Si somos amigos en el corazón de Cristo estamos llamados a ser amigos todos. Llamados a ser un solo corazón para decir no a la guerra y ponernos en caminos de paz.
Que el Señor obre el milagro de la fraternidad, de la amistad social, de la amabilidad y de la verdad para que todos los derechos de los pobres, de los sencillos de los pueblos, sean respetados y la casa común sea cuidada.
La homilía dominical estuvo entre las lecturas del día, la viña amada del Señor y el sacrificio de su Hijo, y la tercera encíclica del papa Francisco, Hermanos todos, firmada ayer (octubre 3) sobre el altar de san Francisco de Asís. Esta encíclica, como la anterior, Laudato Si’, hace un énfasis importante en el cuidado de casa común y la amistad social.
El arzobispo Luis José Rueda siempre ha hecho un importante énfasis sobre la cultura y el respeto de la vida, la convivencia, el respeto por los hermanos, especialmente por aquellos que están en riesgo social y por los que piensan y obran distinto.
“Dios nos ofrece en el capítulo 21 de San Mateo una parábola del maestro de los maestros que es Cristo Jesús y habla de una viña muy querida; de una viña amada, protegida, cuidada que tiene buena cepas, es decir, los troncos, buenas semillas. El viñador esperaba buenos frutos y la arrendó, confió a unos trabajadores. La viña amada del Señor somos nosotros: es usted, es su familia, es su hogar, la Iglesia entera somos la viña amada del Señor, y eso debe llenarnos de alegría inmensa”.
“Nosotros hemos pretendido adueñarnos de lo que somos y no somos, ni siquiera somos dueños de nuestra vida, no somos dueños de la familia, no somos dueños de la casa común, entonces cuando nosotros nos olvidamos de que la viña le pertenece a un dueño -de toda la existencia y de toda nuestra vida- queremos adueñarnos unos de otros y queremos a dañarnos y volverle la espalda a Dios, pero el Señor envía incluso su hijo, nos ama tanto, ama tanto su vida, que habiendo mandado diferentes servidores suyos decide finalmente enviar a Jesucristo su hijo, El Salvador, y dice la parábola que al hijo también lo cogen lo sacan de la viña y lo matan le quitan la vida pero ahí no termina la misión del Señor Jesús, porque Él resucitó y dio la vida por nosotros”.
“El papa Francisco ayer firmó en Asís, en la tierra de san Francisco, la tercera encíclica de su pontificado se llama Fratelli Tutti y allí nos está llamando a la fraternidad universal. Si el mundo descubriera los caminos de la fraternidad universal, si nuestra familia, nuestra sociedad descubriera los caminos de la fraternidad, entonces defenderíamos la casa común, nos santificaríamos, nos convertiríamos en servidores de esa fraternidad”.
“La encíclica Fratelli Tuti nos está diciendo que es necesario encontrar caminos de encuentro entre nosotros, de reencuentro en la familia, entre los vecinos, de reencuentro social, no darnos la espalda, no construir muros para separarnos, no agredirnos unos a otros”.
El Papa dice cómo es de importante encontrar una persona amable y usted puede ser una persona amable amable y eso lo dice también san Pablo, hay que buscar todo lo amable, laudable, lo virtuoso, y el mérito, entonces, el Dios de la paz estará entre nosotros. La amabilidad lleva a la presencia del Dios de la paz, la amabilidad, incluso cuando tenemos conflictos, nos ayuda a perdonarnos, a confiar unos en otros.
Colombia necesita recorrer caminos de Perdón para encontrar la paz y poder dar frutos de paz y reconciliación.
Fuente Disminuir
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