Ordenación Episcopal del Nuevo Obispo de la Diócesis de Caldas

El papa Francisco designó a monseñor Cesar Alcides Balbín Tamayo, como nuevo obispo de la diócesis de Caldas, el pasado 28 de enero; quien  tomará posesión el próximo 19 de marzo.

Para la ceremonia de ordenación estuvo como obispo ordenante principal monseñor Ettore Balestrero, Nuncio Apostólico de Colombia y como primeros obispos concelebrantes, monseñor Jorge Ossa Soto, obispo de Santa Rosa de Osos y monseñor Jairo Jaramillo Monsalve, arzobispo de Barranquilla.

Estuvieron presentes varios obispos de Colombia, sacerdotes, religiosos, religiosas, fieles católicos de esta Iglesia particular y de la diócesis de Caldas en Antioquia.

El recién nombrado obispo durante su saludo de ordenación episcopal expresó su gratitud para con Dios por haber sido agregado como un miembro más del colegio episcopal.

"En este día especial de mi ordenación episcopal les ruego con insistencia y hasta con premura que oren por mí, para que el Señor me conceda santidad de vida, ser testimonio de entrega, pero sobre todo como a Salomón que me conceda sabiduría para gobernar a su pueblo".

"Pongo en las manos del señor mi pasado por mis aciertos, desaciertos y deficiencias, mi presente por mis alegrías y satisfacciones y mi futuro con mis esperanzas e ilusiones. De manera insistente y desde que fue conocida la noticia de mi designación como obispo de la diócesis de Caldas, he pedido sus oraciones para que el Señor haga de mí el Pastor que necesita su pueblo", afirmó el prelado.

Durante su intervención el nuevo Jerarca, agradeció por su designación al Papa Francisco y al Nuncio Apostólico, monseñor Ettore Balestrero, manifestó su gratitud a los obispos, sacerdotes, familiares y laicos, quienes a lo largo de sus 10 años de sacerdote le han apoyado en sus diversas tareas pastorales.

Agradeció además la presencia de las primeras autoridades civiles de Santa Rosa de Osos y de Caldas, "gracias por ese gesto de bondad y generosidad, que el Señor les ayude a cumplir con fidelidad el empeño por el bien común que buscan para sus comunidades".

Resaltó la presencia del clero y las delegaciones que asistieron en representación de la diócesis de Caldas, su nueva sede. Al referirse a los sacerdotes indicó que ellos serán su primera preocupación en este nuevo caminar como pastor.

"Agradezco la cercanía manifestada por parte del clero y la comunidad de la diócesis de Caldas, sede donde estaré como obispo. Manifiesto que ustedes queridos sacerdotes serán la primera y más constante preocupación como pastor, su vida, su ministerio, su entrega y su servicio, trataré de dar lo mejor de mí en este caminar juntos que ahora comenzamos", apuntó.