De la mano de la virgen María, arquidiócesis ora por la unidad y la paz

En la fiesta de la Natividad de la Santísima Virgen María y en el contexto de la Semana por la Paz, la Iglesia católica en Bogotá se unió en oración por la reconciliación y la unidad del país.

Acogidos al amor misericordioso del Padre y a la intercesión de la Virgen María, reina de la paz, encomendaron los hogares, vida y corazón de niños, jóvenes y adultos.

“En esta Semana por la Paz tenemos que decir que nuestros hogares deben ser escuelas, santuarios de paz, talleres de paz, donde se aprende a dialogar, a escuchar; donde se aprende a descubrir el plan de Dios”, señaló monseñor Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de la Arquidiócesis de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), durante la solemne eucaristía concelebrada por los obispos auxiliares: monseñor Luis Manuel Alí Herrera, también secretario general de la CEC; monseñor Pedro Manuel Salamanca Mantilla; y por monseñor Germán Medina Acosta.

Acompañaron la celebración eucarística, en la capilla del Sagrario, el Consejo Episcopal, el personal de la curia e invitados especiales, entre ellos, representantes de jóvenes, líderes parroquiales de la pastoral social y empresarios.

“Signo esperanzado de paz en la natividad de la virgen”

Dirigiéndose a la comunidad congregada, monseñor Rueda agradeció su compromiso por “fortalecerse en el servicio eclesial como instrumentos de paz” y les animó a convertir cada lugar de trabajo en un lugar misionero.

Recordando el valor que representan para la iglesia arquidiocesana y la importancia de cultivar cada día el espíritu en la oración, para servir con amor, explicó que “este es un signo con los laicos misioneros, hombres y mujeres servidores de nuestra arquidiócesis, que han retornado a la presencialidad, después de tantos meses distantes por la pandemia (…) Son hombres y mujeres servidores de la paz y la reconciliación en la misión que realizan”.

“Es un signo orante, lleno de fe, con el Consejo Episcopal, que cada semana presta el servicio del discernimiento, del acompañamiento, de la motivación del Plan E y de toda la vida arquidiocesana; con los hermanos obispos auxiliares; con la vida consagrada de nuestra arquidiócesis: obispos, sacerdotes, diáconos, seminaristas, religiosos, religiosas; con la familia arquidiocesana; con el pueblo de Dios, que peregrina en la esperanza de la paz”.

Conozca detalles de la Semana por la paz, en desarrollo de la ´Caravana de la Amistad Social’ AQUÍ 

Encuentro, escucha y diálogo en torno a la verdad, propuesta para la Semana por la Paz 2021