Conjugar fe con identificación de necesidades

Creada hace 11 años, cuenta con un  equipo de voluntarios de más de 120 personas. Su vida, su familia, y su carrera profesional como abogado, gira en torno a ayudar a los demás, es su único propósito; poner los talentos y Dones que Dios le dio, al servicio de los más necesitados.

Porque Camilo junto a los voluntarios de su fundación, recorren el país, van a regiones como el Chocó, la Guajira, las  periferias de Bogotá, entre otros, para llevar mercados, predicar, escuchar, formar en valores, compartir, realizar jornadas de odontología, construcción de parques infantiles y muchas otras acciones que en torno a las facilidades y donaciones, puedan lograr en los lugares que visitan.

“Vivir con alegría, en paz, recibir bendiciones todos los días y conocer a personas maravillosas, es lo que me deja este servicio en mi vida, en mi familia”, enfatiza Camilo.

Y, es que este mes se celebra el día internacional del voluntariado y en la arquidiócesis de Bogotá, encontramos guiados por la oficina de promoción del voluntariado a: laicos, comunidades, fundaciones y asociaciones que de una u otra forma se preparan para servir y especialmente en este tiempo de pandemia, las ayudas y acercamiento a las personas más vulnerables ha sido muy alto.

Llevar el amor de Jesucristo a las periferias…

La “Fundación Amigos Misión Colombia”, por ejemplo, ha entregado mercados a más 12.500 personas necesitadas en esta emergencia por el covid-19, ubicados en los barrios marginales de Bogotá. Conjugar fe con identificación de necesidades, es la forma de empezar a ser voluntario, ya que hay pobreza todos los días; hay necesidad de vestido, miserias espirituales y hambre.

“En el camino del servicio se aprende todos los días, sin embargo, es importante prepararse; tanto emocional, como espiritual y físicamente”, afirma Camilo Devia, nuestro invitado especial y gran ejemplo de servicio a través del voluntariado: