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En Cúcuta cerca de mil personas recibieron formación sobre prevención de abusos

17 de mayo de 2023
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Alrededor de mil personas, entre sacerdotes, religiosas, seminaristas, agentes de pastoral, colaboradores parroquiales y docentes de colegios católicos, acudieron los días 10 y 11 de mayo, al llamado hecho en la ciudad de Cúcuta por la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) y las cinco jurisdicciones eclesiásticas que integran la Provincia de Nueva Pamplona para participar de las jornadas de capacitación sobre prevención de abusos contra niños, niñas, adolescentes y personas vulnerables. Espacios pedagógicos que fueron desarrollados en el marco de la iniciativa denominada ‘Iglesias particulares seguras y protectoras’ que implementa desde el 2022 la CEC, gracias al apoyo de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos

Durante esta cuarta versión de las charlas y talleres sobre cultura del cuidado que realiza a la Iglesia a nivel regional fueron seis los temas protagonistas: 1. Fundamentos canónicos y elementos centrales a tener en cuenta ante un delito de este tipo. 2. Atención a las personas víctimas. 3.  Líneas guía de la Conferencia Episcopal para la cultura del cuidado en la Iglesia colombiana. 4. Procesos integrales de prevención. 5. Líneas operativas y buenas prácticas para la cultura del cuidado. 6. Comunicación transparente, efectiva y afectiva. 

Además de la importante delegación de la Diócesis de Ocaña, en las jornadas estuvieron presente, de manera permanente, los obispos de las otras cuatro iglesias particulares convocantes: la Arquidiócesis de Nueva Pamplona y las diócesis de Cúcuta, Tibú y Arauca, es decir, monseñor Jorge Alberto Ossa Soto, monseñor José Libardo Garcés Monsalve, monseñor Jaime Cristóbal Abril González y monseñor Israel Bravo Cortés. 

Al cierre de los espacios de formación, monseñor Luis Manuel Alí Herrera, obispo auxiliar de Bogotá y Secretario General de la CEC, junto a los miembros del Consejo Nacional para la Cultura del Cuidado, quienes fueron los principales facilitadores de estas capacitaciones, se reunieron con los integrantes de las cinco comisiones diocesanas encargadas de estos procesos, integradas por consagrados y laicos, para brindarles una serie orientaciones a propósito de su rol en esta importante misión de prevención y atención. 

Sobre este último encuentro, monseñor Jorge Alberto Ossa afirmó que fue muy iluminador, para definir con mayor claridad las competencias de las diferentes comisiones diocesanas frente a los procesos jurídicos que se deben llevar a cabo para prevenir situaciones de abuso, acompañar los procesos y para recibir la información de los casos. “Nos dan unas líneas muy claras a fin de que revisemos cómo son esas comisiones y las pongamos en el camino correcto para que cumplan su oficio, nos apoyen y nos apoyen también a las comunidades”, precisó el arzobispo. Agregó, además, que, aunque en las diócesis ya cuentan con protocolos, las orientaciones recibidas les permitirá “revisarlos, adaptarlos y trabajar más en la prevención y hacer las actividades correspondientes desde la misma provincia”. 

A manera de balance, en representación de los demás obispos de la provincia, monseñor Ossa aseguró que las jornadas fueron enriquecedoras e importantes porque se generaron espacios para que no solo sacerdotes, religiosas y seminaristas, sino también los miembros de las comunidades, “especialmente los agentes de pastoral más cercanos, sepan y nos involucremos todos en hacer de nuestras iglesias precisamente un lugar seguro, seguro para los niños, donde se pueda predicar el Evangelio, donde ellos y sus padres de familia sientan también la confianza de que la iglesia está esforzándose por hacer las cosas cada día mejor”.

Por su parte, el padre Juan Manuel Montañés, miembro de la Comisión para la cultura del cuidado de la Diócesis de Arauca, dio también un balance positivo del encuentro, valorando la información recibida para poder llevarla a la vida práctica de su jurisdicción. 

El padre Jorge Gualteros de la Diócesis de Tibú reconoció que, además de las situaciones que se pueden presentar en ambientes eclesiales, en medio del complejo social que tienen en algunos de sus municipios, tan afectados por la violencia y el conflicto armado, muchos niños han sufrido situaciones de abuso también por parte de familiares y actores ilegales que hacen presencia allí. “Entonces hay una problemática muy grave con nuestros menores y en estos encuentros encontramos estrategias precisamente para que desde la Iglesia comencemos a ayudar a aportar en la transformación de nuestra sociedad y de esta realidad difícil que vivimos en el territorio”, afirmó el sacerdote. 

 

Capacitaciones sobre cultura del cuidado en la Provincia de Nueva Pamplona
Fuente:
Conferencia Episcopal de Colombia
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