Servir a los pobres y vivir la pobreza
Luis José Rueda Aparicio, en el barrio El Codito, donde se compartió con la comunidad el pan de la Palabra; la Eucaristía, también un desayuno y una ofrenda. Más de 250 familias se congregaron en el sector de El Codito, en los cerros orientales, localidad de Usaquén, el domingo 19 de noviembre de 2023, a partir de las 7:30 de la mañana.
“El Codito”, está dentro del territorio de la vicaría Padre Misericordioso, de la arquidiócesis de Bogotá. Por esta razón, los párrocos del arciprestazgo 7.5; con las comunidades de las parroquias: San Calixto Caravario, Santa Cecilia Romana, San Juan Bosco, San Juan Diego, San Luis de Tolosa, junto al vicario general, el padre Rafael De Brigard, la Diaconía para el Desarrollo Humano Integral de la vicaria de evangelización de la arquidiócesis y la parroquia Beato Miguel Rua, anfitriona de este encuentro, en la casa de los padres de la Orden de la Madre de Dios, ubicada en este sector, fueron los organizadores de esta jornada de compartir fraterno y de mostrar el rostro misericordioso de Dios a las comunidades allí presentes.
“No Apartes tu rostro del pobre”
Así mismo, integrantes de la Diaconía Desarrollo Humano Integral , de la vicaria de evangelización de esta iglesia particular, colaboraron en la organización general y logística de esta jornada.
“El gran talento, el gran tesoro está en el otro…hacer salir lo mejor que tiene nuestro prójimo, sus mejores cualidades. Y, la capacidad de trabajar en red los talentos, en grupo, en comunidad. No debemos esconder los talentos, todo lo contrario, multiplicarlos y ponerlos al servicio de los demás”. Enfatizó el cardenal en su homilía en la Sagrada Eucaristía que se llevó a cabo a las 8:00 de la mañana, dando inicio a esta celebración.
Luego de compartir el pan de la Palabra con los feligreses de esta localidad, se les compartió un desayuno, para disfrutar un momento fraterno, en compañía de las familias, vecinos, amigos y como miembros de una sola Iglesia, que los escucha, los reconoce y los cuida.
También, el coro de la Fundación Música en los Templos, fundación arquidiocesana, acompañó con las voces doradas, de adultos mayores, esta celebración. Jóvenes voluntarios de las parroquias organizadoras y servidores en general, se unieron a esta labor.
Finalmente, el Banco de Alimentos de Bogotá compartió con los asistentes una ofrenda, un mercado compuesto por frutas y verduras pero también con alimentos no perecederos, dando de esta manera concluida esta VII Jornada Mundial de los Pobres, haciendo viva la frase que el papa Francisco instituyó para este año: “No Apartes tu rostro del pobre”.
María, madre de los pobres
El cardenal Luis José Rueda al finalizar la celebración de la eucaristía, elevó una oración a la Virgen María, frente a un cuadro de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá, patrona de Colombia:
Oración a la Virgen María, madre de los pobres
Ella es María madre de los pobres: María madre de los pobres eres reina del cielo y servidora del mundo, eres virgen y madre y misionera mano tendida de Dios para la humanidad. María madre de los pobres reaviva en nosotros tus hijos la generosidad que sostiene al débil, que consuela al afligido, que alivia los sufrimientos y devuelve la dignidad.
Alégrate llena de Gracia contigo nos llama Dios a vivir la fraternidad. Santísima Virgen María, ante el grito silencioso de los pobres muchas manos tendidas vemos cada día, manos tendidas sin miedo para aliviar y consolar para curar y acompañar. Manos tendidas que son milagro de ternura.
Canto de cercanía y encuentro esperanza, de vida nueva. “Alégrate” llena de Gracia, contigo nos llama Dios a vivir la fraternidad. María madre de los pobres que tu presencia bendita tras nuestras manos tendidas en brazos de paz y fraternidad. Amén.
A continuación palabras del cardenal Luis José rueda Aparicio:
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