Casa Santa Isabel de Hungría, expresión de una Iglesia misionera y misericordiosa

Acoger y dignificar a mujeres en situación de prostitución, recicladores y familias vulnerables en la zona de tolerancia del barrio Siete de Agosto, en la capital colombiana, es el propósito de esta obra liderada por la Vicaría Episcopal Territorial Cristo Sacerdote.

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“Esta obra fue una llamada del Señor, a través de la Iglesia arquidiocesana. El arzobispo nos llamó a hacer misión en los lugares donde ya está sembrada la semilla, pero también en los desiertos, en las periferias de la existencia. Y en la vicaría experimentamos esta zona y esta realidad como una periferia: es un lugar de mucho tráfico, adicciones y de muchas hermanas y hermanos situados en la prostitución. Con sus vidas muy heridas, en mucha dificultad (…) Por ello, queremos que esta población encuentre un oasis en medio del desierto, poderlos acompañar en su camino”, acercándolos al rostro y amor misericordioso del Padre, explicó monseñor Julio Solórzano, vicario episcopal en Cristo Sacerdote.

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Esta obra de misericordia, que lleva el nombre de la santa patrona de la Arquidiócesis de Bogotá: Santa Isabel de Hungría, testimonio de caridad, fue bendecida en el marco de la visita pastoral del cardenal José Rueda Aparicio, junto a los obispos auxiliares a esta vicaría, realizada del 29 al 31 de agosto.

“Esta es una obra de compromiso, de misión, de misericordia, de servicio a las mujeres en condición de prostitución. Me alegra porque ellas han sido relegadas, estigmatizadas, rechazadas, pero la Iglesia es acogedora. La Iglesia arquidiocesana ha comprendido bien que la misión es acogiendo, es recibiendo, sanando, es ayudando a dignificar”, precisó el cardenal.

En esta casa se brindarán servicios de alimentación, acompañamiento psicosocial, espiritual y formación. Cuenta con un equipo inicial de tres profesionales en administración, psicología y trabajo social, quienes, en articulación con sacerdotes de la vicaría y con el equipo de voluntarios, liderarán el acompañamiento a esta población, promoviendo su dignificación. 

Acogida, celebración, consagración y envío misionero

En desarrollo de la visita pastoral a esta Vicaría, el cardenal y los obispos auxiliares, también, se encontraron con los párrocos y vicarios de las 41 parroquias que conforman la zona pastoral, en el norte de Bogotá; con la vida consagrada; con los diáconos; con los animadores de evangelización; con los jóvenes y sus familias; y con distintas estructuras de servicio, quienes reiteraron su compromiso con la pastoral y con el llamado a ser una Iglesia misionera y misericordiosa.

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