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Volver al corazón

12 de noviembre de 2024
Imagen:
Paray le Monial, Francia

La reciente encíclica del papa Francisco: Dilexit Nos, expresión en latín que significa”¡Nos amó!, es una expresión de san Pablo, fue publicada el 24 de octubre de 2024, y trata sobre el amor humano y divino del Corazón de Jesús. Es la cuarta encíclica del Pontificado sobre este tema, un documento profundo, bello y lleno de reflexiones sobre el corazón de Jesús como centro unificador de la fe cristiana y como centro unificador, por supuesto, del ser humano.

En sus primeras páginas el Papa nos recuerda que el corazón del hombre es el  centro de la vida misma, lugar de la sinceridad, donde no se puede engañar ni disimular. Es la propia verdad desnuda. Y nos invita a volver al corazón, a darnos cuenta lo que significa, especialmente ahora, en este mundo líquido, expresión de Francisco, porque nos movemos en sociedades de consumidores seriales, dominados por la tecnología, y sin paciencia para mirar al interior de nuestro ser, en pocas palabras nos dejamos arrebatar el corazón.

“Si el corazón está devaluado también se devalúa lo que significa hablar del corazón, actuar con corazón, madurar y cuidar el corazón…porque la verdadera aventura personal es la que se construye desde el corazón y al final de la vida contará solo eso”. Pero también, cada párrafo nos ofrece un sinfín de razones que nos hace volver a lo más preciado, a lo más importante de los seres humanos; a nuestro propio “corazón”…aquel que nos lleva al centro íntimo de nuestra persona, también nos permite reconocernos en nuestra integridad. 

Es capaz de unificar y armonizar nuestra historia personal. El corazón hace posible cualquier vínculo auténtico. Porque una relación que no se construya con el corazón es incapaz de superar la fragmentación del individualismo.

Por otra parte, el Pontífice nos invita a confiar en el amor de Cristo, representado en su Sagrado Corazón, que forma parte de una larga tradición. En Europa, esta devoción al Corazón de Jesús se extendió hace 350 años con las apariciones en el santuario de Paray-le-Monial, en Francia, cuando Jesús se apareció a Santa Margarita María de Alacoque, una monja, mientras oraba. Jesús le mostró su Corazón, que estaba rodeado de llamas, coronado de espinas y con una herida abierta. Jesús le dijo a Santa Margarita: "He aquí el corazón que tanto ha amado a la gente y en cambio recibe ingratitud y olvido. Tú debes procurar desagraviarme". 

El papa Francisco, de manera metódica, pedagógica y clara responde también preguntas sobre obstáculos u objeciones que se oponen a esta devoción al Sagrado Corazón de Jesús. Cita autores que han jalonado esta espiritualidad y evidencia frutos en la Iglesia para vivir en ella la compasión y la dimensión misionera, haciendo resplandecer la frescura y la actualidad de esta devoción.

Cabe resaltar que es la cuarta encíclica sobre el Sagrado Corazón de Jesús, pero es la primera encíclica que está ligada por la fecha a los eventos ocurridos en este santuario Paray-le-Monial, ya que esta año se celebran precisamente 350 años de las  apariciones a santa Margarita María Alacoque el 27 de diciembre de 1673.

(Margarita María, monja francesa, perteneció a la Orden de la Visitación de Santa María, recibió a finales del siglo XVII, tres mensajes de Jesús a la humanidad en tres dimensiones; una declaración de amor, una queja y una petición). Léase en la página 71, en adelante…

Además, el Papa cita de manera precisa estas apariciones a Margarita María en Paray-le-Monial, para que se conozcan esos mensajes. También nombra 10 santos franceses en esta encíclica.

El rector del santuario de Paray-le-Monial, cuna de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús, el padre Etienne Kern, en algunas declaraciones a la prensa recientemente, comenta sobre esta publicación: “Uno tiene la impresión de que el mensaje de Paray-le-Monial es aún más actual hoy que entonces. Cuando el Señor se queja de la ingratitud y la indiferencia, tal vez esté hablando de nuestra época, que es una época de ingratitud, de indiferencia hacia Dios y, en consecuencia, hacia nuestros hermanos. 

“El vínculo social se desmorona y, por eso, cuando el Señor muestra su corazón, que es manso y humilde, invita a una especie de “milagro social”, expresión que utiliza el papa Francisco en su encíclica para que esta experiencia que tenemos de Dios transforme nuestra manera de actuar”. 

Francisco subraya también la importancia de volver al Sagrado Corazón para reparar los corazones heridos y, con ello, el daño que se ha hecho al mundo.

La gente necesita encontrar consuelo en el Corazón de Jesús, encontrar descanso en el Corazón de Jesús, experimentar que Dios consuela, cura, repara. Porque es Dios quien repara. Y nosotros somos testigos de esta reparación y entramos en este movimiento de reparación humildemente, ocupando nuestro lugar y dejando que Dios actúe en nuestros corazones con fuerza y poder. Es lo que dice el Señor a santa Margarita María: “Si crees, verás el poder de mi Corazón”. Las personas que vienen a Paray-le-Monial para encontrar descanso en el Corazón de Jesús experimentan la dulzura, la infinita dulzura de Dios y, al mismo tiempo, su poder de recreación, consuelo y reparación”, enfatizó.

Dilexit Nos, es una encíclica que no solo vale la pena leer, sino rumearla como dice el dicho popular; reflexionarla, degustarla; es permitirle a nuestro corazón volver a nosotros y relacionarse de manera más íntima, con el Corazón del Señor. 

Ahora que se acerca la Navidad, un bello obsequio que probablemente podrá cambiar vidas.

Oficina Arquidiocesana de Comunicaciones
Fuente:
Redacción
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