La Iglesia amazónica rechaza violencia de grupos criminales y expresa solidaridad con el pueblo ecuatoriano
En medio de la crisis que vive Ecuador tras los actos violentos por parte de grupos criminales y la declaratoria de “un conflicto armado interno” por parte del Gobierno, la Iglesia amazónica ha expresado su solidaridad con el pueblo y las autoridades.
Es así como la Conferencia Eclesial de la Amazonía (Ceama) y la Red Eclesial Panamazónica (Repam) han señalado que se trata de una “escalada de violencia injustificable”, que ha llevado al caos y desesperación.
Por ello, han condenado estas acciones violentas de las mafias y han hecho un llamado a la paz para que ciudadanía y fuerzas políticas del país se unan por la pacificación.
Pidieron a la “comunidad internacional” seguir de cerca la situación de Ecuador “a brindar apoyo a las autoridades en sus esfuerzos por restablecer la paz y la seguridad”.
Trabajar por la paz y seguridad
El cardenal Pedro Barreto Jimeno, presidente de la Ceama y arzobispo de Huancayo (Perú), envió una carta a los integrantes de esta instancia en Ecuador, manifestando “nuestra profunda preocupación y condenamos las recientes acciones de violencia perpetradas por grupos del crimen organizado en diversas ciudades ecuatorianas”.
Citando al papa Francisco, recordó la importancia de la palabra paz como “un don divino, pero también una responsabilidad compartida”, por ello, “abogamos por buscar y trabajar incansablemente por la paz, una tarea frágil pero significativa en su compromiso”.
El purpurado reafirmó su preocupación y solidaridad con el pueblo ecuatoriano, mientras que desde la Ceama acompañarán “los esfuerzos destinados a restaurar la seguridad en el país, con la esperanza de que los ecuatorianos y ecuatorianas puedan vivir finalmente en paz y seguridad”.
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